La planta de Mora está conformada por varios tallos
que se forman en forma de corona desde su base, son
redondeados y espinosos, de uno a dos centímetros de
diámetro y pueden crecer hasta tres metros. La fruta se
presenta de color verde cuando se forma, pasando a rojo
y luego a morado oscuro y brillante cuando madura.
Es rica en vitamina C, calcio y fósforo, agridulce, y
apto para obtener jugos, néctares, mermeladas, jaleas,
helados, repostería y confitería. Una planta produce
aproximadamente a partir del año, hasta los 12 a
20 años de vida.